Prueba nuestros moluscos

Hoy me voy a dar el gusto y voy a acudir a una degustación de moluscos frente a la laguna.
 

  •  - © Olivier Octobre
No voy a mentir… Si he venido de vacaciones al archipiélago de Thau, no es solo para tumbarme al sol. Epicúreo de corazón, sobre todo me gustaría degustar todas las especialidades locales, sobre todo, los famosos moluscos de la laguna de Thau.

¡No hay tiempo que perder! Me dirijo hacia el norte de la laguna, entre Bouzigues y Loupian, donde los productores ofrecen degustaciones en su lugar de producción, los criaderos de moluscos.

Una vez allí, me siento inmediatamente inmerso en su ambiente. Objetivos: placer y relajación. Y el entorno también es maravilloso. Tomo asiento en una mesa sobre una terraza de madera, frente al azul profundo de la laguna, con unas vistas extraordinarias de los parques de ostras y de Sète como telón de fondo. ¡Por fin tengo la sensación de que empiezan mis vacaciones!

Una productora de acento cantarín me da amablemente la bienvenida. Tomo el menú: ostras frescas o gratinadas, «brasucade» de mejillones (mejillones a la parrilla). Y para acompañarlo, opto por un vino blanco local, siguiendo los consejos de mi anfitrión.
Al finalizar mi comida, tengo ganas de saber más sobre la producción de estos moluscos y sobre la historia de la laguna. He escuchado como mis vecinos de mesa hablaban sobre su visita al museo de la laguna de Bouziges, situado a tan solo unos pocos kilómetros de distancia. ¡Una pausa al fresco no me hará daño!

Una vez allí, no me decepciona lo que veo. El museo presenta objetos e instrumentos utilizados para la pesca y la cría de moluscos, mientras describe la historia de la laguna de una forma muy comunicativa. ¡Una visita muy instructiva! Ahora, solo tengo ganas de una cosa: ¡partir al descubrimiento de los parques ostricolas y de la laguna en barco!
  •  - © Rodolphe Baras - OT Archipel de Thau Méditerranée
  •  - © Rodolphe Baras - OT Archipel de Thau Méditerranée
  •  - © Rodolphe Baras - OT Archipel de Thau Méditerranée
  •  - © Nicolas Chauveau